Cibermitanios

El Diluvio Universal según Cibermitanios

Lo que se había traspapelado.
Continuando con la revelación divina que se me ha encomendado, veremos la historia del Diluvio Universal junto a las explicaciones pertinentes que se habían traspapelado, y que gracias a Dios hoy se hacen públicas. Advertencia: las personas con creencias religiosas no deben leer este texto si no están dispuestas a tomarlo con humor y/o inteligencia. Este material puede contener alusiones directas o indirectas a la verdad.


1
En esta otra ocasión, Dios vio que nadie prestaba atención a las leyes que con tanto esfuerzo había creado e hizo que lloviera mucho.


2
Y llamó Dios a este evento "Diluvio Universal", no porque creyera que la Tierra era el centro del universo, o que cuando llueve en la Tierra necesariamente llueve en el espacio, sino porque quiso demostrar la teoría de Einstein de que el cosmos está curvado, más precisamente en dirección a la Tierra.


3
En fin... Como cada varios miles de años Dios viene a regar las plantas, pero no es muy buen jardinero que digamos y a veces se le va la mano, en esta ocasión le dijo a un tal Noé que construyera un barco y metiera allí a dos animales de cada especie. Noé, entusiasmado por haber sido elegido como ayudante (porque Dios no hubiese podido construir el barco solo porque no tiene manos), puso manos a la obra.


4
Pero ni bien empezar, Noé, que sólo conocía dos o tres razas de perros, se dio cuenta de que en realidad había más de cincuenta millones de especies y que debería acomodar muy bien a cada animal para aprovechar el espacio, y que, además, debía incluir algunos animales extra para que comieran los otros animales.


5
Y así fue como nació el Tetris, pero ese es otro tema.


6
Noé apresuróse y terminó el barco y lo llenó de animales en menos de una semana, y todo este apuro porque ya tenía 600 años de edad y quería que todo terminara rápido porque sabía que luego tendría que repoblar la Tierra con sus descendientes, y estaba preocupado por cómo haría para engendrar negros y chinos.


7
Comenzó a llover y en pocos días todo fue inundado y destruido, incluyendo a las leyes de la física, y de todos los barcos que existían sólo flotó el de Noé y sus ocupantes vivieron sin comer durante un año. No tiene nada de raro.


8
Pero las plantas realmente tenían mucha sed y comenzaron a beber los trillones de litros de agua que cubrían la tierra (pero que no pesaban nada porque podrían haber aplastado a las plantitas) y así toda el agua despareció de la faz de la Tierra sin dejar rastros.


9
Después de este incidente, el Señor (o Señora o Señore) se sintió un poco mal y prometióle a Noé que nunca jamás castigaría al Hombre, y es por eso que hoy somos tan felices.


10
Noé vivió los siguientes 350 años totalmente borracho y murió de cirrosis a los 950 años de edad, y así lo asentó Dios en la Biblia, que es ni más ni menos que su diario íntimo.


11
Dios, por otro lado, dedicó los días siguientes a secar y limpiar el desastre que había causado, para que apenas 5.000 años después no quedara rastro alguno de ello. En el fondo es un buen tipo; sólo tuvo una pequeña crisis.


12
También enterró los cadáveres de los dinosaurios que Noé había olvidado de salvaguardar (mientras gritaba "¡Ay, Noé, Noé... qué cabeza la tuya!"), y lo hizo en diferentes capas que simulaban que habían existido en diferentes épocas y que habían sido extintos por diferentes eventos separados por 250 millones de años.


13
Y la razón de lo anterior es que no le gustó a Dios que todos los cadáveres, incluyendo a los de los hombres, quedaran en posición de "socorro, me ahogo por el diluvio".


14
Y para completar la ilusión, tomó la tierra y le metió a mano, gramo por gramo, trillones de isótopos de 80 millones de años de antigüedad para que los geólogos no pudieran establecer mediciones con respecto al diluvio y que así no hubiera prueba alguna ni teoría mínimamente válida para justificar la existencia del mismo. Muy inteligente.


15
Al terminar con lo anterior, Dios se dedicó a escribir los acontecimientos en la Biblia, pero siempre hablando en tercera persona, por las dudas de que no tuviera buena crítica.


16
Dios es muy quisquilloso con su pasado. No le gusta dejar rastros de su ira, y esto es una importante enseñanza encubierta que nos regala en su infinita sabiduría: cuando alguien no te haga caso, mátalo, pero no dejes evidencias.