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Las 5 mujeres más extrañas del mundo

Por supuesto, la lista es simbólica... ¿Quién puede reducir la riqueza del misterio femenino a sólo cinco ejemplos? No yo, seguro; por la misma razón que no entiendo por qué creen algunas lectoras dicen que soy machista. Pero eso no importa. Veamos estas cinco mujeres que sobresalen en extraños aspectos, algunos divertidos y otros para realmente ponerse a pensar. Espero que las feministas también puedan disfrutarlo.

Cómo entender la mirada de una mujer

Buenas noches... buenas noches. Gracias. A los que no me conocen, me presento como el Profe Poronguetti, estudioso insaciable de los insondables enigmas del inconsciente femenino especializado en jeroglíficos sonoros pre menstruales. Estuve en varios lugares donde ningún otro hombre o ser inanimado estuvo jamás, tengo dos manos y en mi tiempo libre doy clases de danza árabe. Ahora sí, comencemos la lección...

¿Por qué hablan tanto las mujeres? (casi resuelto)

Ya lo sospechaba yo: las mujeres hablan mucho más que los hombres, el triple, para ser más exactos. Alguien se encargó de contarlas: mientras que los hombres articulan diariamente unas 7.000 palabras, ellas, 20.000. Esto, por si a alguien se le ocurre, no significa que tengan un mayor vocabulario, sino que simplemente –según un estudio actual– sus cerebros están diseñados para hablar más...

Lo que quieren las mujeres, según la ciencia

Hola. Soy el profesor Poronguetti. Bienvenidos a mi cátedra titulada "Mujeres I". A lo largo de este curso, veremos que además de agujeros negros y ejércitos de robots invisibles, la ciencia también se dedica a estudiar otros misterios insondables. Entender a las mujeres no es fácil. En esta clase veremos los 10 primeros descubrimientos científicos relacionados al pensamiento de la mujer, sus sentimientos y su sexualidad...

Novias rubias y esposas morochas

Según un artículo publicado por Telegraph, las mujeres rubias son mejores novias y más divertidas que las de cabello negro o castaño, pero es mejor casarse con estas últimas porque son más cariñosas y mejores amas de casa. Esto, según la sabiduría de 3.000 hombres encuestados. Pero la cosa no termina ahí (mejor dicho, no empieza ahí): Darwin ya lo había notado hacía mucho tiempo...