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¿Libre albedrío?

La ciencia dice que no existe, la filosofía que sí, y...
¿Existe el libre albedrío? Para ahorrarme los pasos iniciales que invoca esta pregunta e inspirarme a intentar responderla por mí mismo, los académicos ya debatieron al respecto y obtuvieron opiniones divididas. En general, la ciencia votó en contra, mientras que la filosofía, a favor. Claro que estos son casos extremos, y la realidad podría ser una mezcla de ambos o algo completamente distinto (incluso: nada).


El punto de vista científico



El cerebro es una máquina electroquímica sujeta a las leyes de la física. Todos sus procesos son reacciones de una estructura genéticamente programada ante los estímulos del mundo exterior. Según este enfoque, la mente debería ser algún día completamente predecible. (Es evidente que los científicos no tienen mucho trato con las mujeres.) Y, si la mente es predecible, está predeterminada y el libre albedrío es una ilusión.

No es el punto de vista más romántico, pero es fascinante. Si las cosas fueran así, tendríamos una nueva y extraña definición de consciencia: el atestiguar pasivo y abstracto de los procesos informáticos que lleva a cabo la mente; no existiría tal cosa como las decisiones conscientes, sino más bien una consciencia de las decisiones, y nuestra libertad abarcaría sólo ese misterioso don de conocer, hasta cierto grado –hay que admitirlo–, el funcionamiento de algo completamente automático: uno mismo.

En tal caso, todas estas palabras serían sólo la expresión de una combinación azarosa de genes y experiencias, y eso que llamo "yo" no sería más mío que una película que únicamente yo he visto sin tener siquiera la posibilidad de no verla o de cambiarla por otra. En este marco, seguimos siendo maravillosamente únicos, pero como una artesanía de la naturaleza, sin ningún tipo de soberanía sobre nosotros mismos.

Sin embargo, si esta es la verdad del asunto, "yo" sería algo más vasto y complejo que una autonomía individual; "yo" sería una parte de la naturaleza que si bien está condicionada, lo está gracias a la libertad de la misma naturaleza para combinar átomos y genes de manera prácticamente infinita. Después de todo, no tendríamos libertad, pero seríamos una manifestación de la libertad misma. No perderíamos con esto nuestra individualidad y, de hecho, nuestra percepción consciente de la vida seguiría intacta: nos pasan cosas y pensamos, sentimos y actuamos en consecuencia.

Aunque este determinismo suene incómodo (lo cual podría ser una señal de que es verdad), es una posibilidad que vale la pena tener en cuenta, o al menos así lo sugieren las señales eléctricas que se desenvuelven en mi cerebro, que son productos de complejas reacciones químicas gobernadas por las leyes de la física y que, por lo tanto, no podrían ser de otra manera.


El punto de vista filosófico



Aunque se conceda el determinismo físico, la definición de "decisión" de los científicos es incorrecta. Decidir es, filosóficamente, la capacidad de abstraerse uno de sus condiciones actuales, evaluar las alternativas posibles y actuar de acuerdo con la que cumpla la mayor cantidad de criterios, aunque éstos estén determinados por la genética y la historia. Ese instante de abstracción, consciente o no, es la libertad de la que gozamos, y sucede a cada instante, por ejemplo, mientras elijo una palabra de entre varias posibles... o quizá una imagen o una canción, o ñdkjfdajvhbli, lo cual era bastante impredecible. Tengo al menos la libertad de presionar teclas al azar, así como de ejecutar otros movimientos errantes y de tomar decisiones basadas en algún programa mental equivalente a lanzar una moneda, que no es poco (pedir más albedrío sería absurdo porque requeriría comandar conscientemente cada mínima función celular).

Un filósofo aparentemente poco respetable dijo algo interesante al respecto: Para que haya libertad, no basta que nadie nos fuerce lo exterior. Es preciso, además, que no haya en nosotros ninguna necesidad intrínseca que nos mueva a obrar de una manera determinada. Evidentemente, las necesidades están y nos esclavizan; pero también es cierto que podemos trabajar hasta cierto punto para eliminar algunas "necesidades innecesarias" –aquellas que no nos conduzcan a la muerte–. Tal es el fin perseguido por el budismo, por ejemplo, que es una corriente filosófica, aunque no lo parezca: desprenderse del "yo", principalmente eliminando los deseos –que tan frecuentemente confundimos con necesidades y que nos son sin dudas impuestos por un historial genético y ambiental–.

La contemplación pura que nace de la meditación es ese estado de evaluación de las posibilidades, pero evitando apegarse a una de ellas en particular; es consciencia cristalina y libertad de la percepción, como un estado de shock; se es libre hasta que se decide. Y quizá también sea posible actuar de modo semejante, animalmente, aunque queda aún por comprobar quién es más robótico, si el animal o el Hombre con sus mecanismos de sobra.

Claro que quizá el budista esté programado para hacer exactamente eso. Pero una vez alcanzado el objetivo del programa compilado por el azar, aunque sea momentáneamente, es libre; ya no elige qué percibir porque ya no piensa, no utiliza ese conjunto de reglas lógicas que llamamos razón y que bien usadas son completamente determinantes, como las matemáticas. Por esto último –como nota al margen– es que basándose en la razón pura cualquier persona debe llegar a la misma conclusión que el resto sobre un asunto en particular, porque la razón es un juego con reglas muy estrictas, siempre que las cartas estén echadas. Por lo tanto, quizá, la "libertad de pensamiento" no sea precisamente el mejor ejemplo de libertad, a no ser que sea un pensamiento irracional.


El tercer punto de vista


¡Buuu!
Ahora bien, tenemos a los científicos, cuyo pensamiento general se rige por diferentes conjuntos de reglas, métodos y convenciones que obviamente empujan sus velas siempre en la misma dirección; y tenemos a los filósofos, que suelen aventurarse más allá de lo históricamente seguro o infalible y que idealmente podrían alcanzar infinitas costas diferentes, lo cual les da una ventaja al menos en materia de elección, ya que los científicos mencionados no podrían haber razonado nada de aquello antes de la existencia de la neurología o del método científico mismo, mientras que los filósofos pudieron siempre pensar que ni siquiera existimos, o que existimos pero no sabemos pensar, o que pensamos pero no existimos, etc. Éstos buscan sus límites, sus posibilidades dentro del mundo en el que están arrojados, destruyendo a propósito sus velas, mientras que aquellos, los científicos, buscan los límites y posibilidades del mundo en sí mismo manteniendo un curso recto siempre que la calidad del timón se los permita.

A favor de la cosmovisión budista, incluso con aval del método científico, hay que decir que la vida es sólo presente. El pasado y el futuro son pensamientos en el presente. El pasado y el futuro son, en fin, pensamientos, mientras que el presente es percepción, ya sea del mundo externo o de los propios procesos internos. Si eliminamos el pensamiento de todo esto, y por ende pasado y futuro, nos quedamos sin los condicionamientos de la experiencia y del deseo (que siempre es por algo que puede no estar, pero que se imagina pudiendo estar en el futuro). Pero la maquinaria genética no queda sola, sino acompañada del fenómeno de la percepción, esta vez sin referencias ni preferencias, como una esponja que es libre de absorber todo lo que toca sin clasificarlo de modo alguno, como viendo discutir a un montón de chinos sin posibilidad de relacionar esa experiencia con un "yo" (cosa de la que las esponjas carecen por completo –al menos la que tengo en la ducha, que se deja hacer cosas innombrables porque no posee libertad ante la fuerza que le represento–).

Alternativamente, pienso que el verdadero "yo" es donde la distancia no existe. Uno siempre está a cero distancia de sí mismo, y con precisión matemática. En este sentido, sólo hay un yo y no cambia porque es un simple punto de referencia. Sin embargo, es un punto móvil en el mundo, y esa movilidad debería bastar para proclamarnos libres, ya que, aunque los planetas también son móviles pero no libres sino que como nosotros están sujetos a fuerzas, nosotros tenemos además fuerzas propias, internas. Y no las llamaré voluntad ni conciencia ni espíritu sino simplemente "nuestras" (aunque estoy tentado por llamarlas "percepción"). Cada uno, en este sólido laberinto de fuerzas incomprensibles, tiene un camino propio infinitamente más rico que todas las órbitas planetarias del cosmos, y el recorrido de ese camino es el libre albedrío, aunque el camino haya sido dibujado catorce eones atrás. Sólo cuando se nos prohíbe hacer uso de ese camino, de esa posibilidad completa que hemos heredado, es que perdemos la libertad.

Pero también debo contradecirme brevemente porque, por sobre todas las cosas, la libertad es estar en desacuerdo con la realidad, y poco importa que se pueda actuar. Es la posibilidad que empuja desde adentro aún frente a la más insalvable esclavitud, ya sea la de una prisión de máxima seguridad o la de los intangibles muros del universo. Por eso, en nombre de la libertad, no me creo nada de lo que acabo de decir, de principio a fin.

Quizá –pienso finalmente– somos libres como es libre un electrón desprendido de un átomo o como un pedo emancipado de un culo: aún a merced de otras fuerzas, pero innegablemente librado a su destino.

25 comentarios

  1. Bueno en lineas generales, la ciencia dice que por genética, nuestro camino, y nuestras decisiones están determinadas por unas reglas inquebrantables, y que a pesar de la ilusoria sensación de libertad que nos produce elegir a fin de cuentas todo está determinado, sin embargo la filosofía por otro lado dice que las decisiones no estarían determinadas por leyes físicas, ni por el cómo se rige nuestro cerebro, sino que es la capacidad para elegir entre lo que nos favorezca más según la circunstancia. Si algo tienen en común estos puntos de vista, es que evidentemente dejan claro que el libre albedrío es una dependiente directa de lo que sucede en nuestro entorno, y debo decir que mi inclinación es la filosófica, ya que en ésta de cierta manera está contemplada la incertidumbre, y esta en cierto modo me parece a mí que es crucial en el libre albedrío pues ¿qué haríamos si no hubiese incertidumbre? ¿si todo estuviese determinado como dice la ciencia? notablemente el concepto "libre albedrío" no sería más libre de lo que creemos que somos.
    Es cierto que la razón nos permite llegar al mismo punto, pero también es cierto que la razón nos permite un camino diferente para llegar a él, y esto es libertad que se nos esfuma en cuanto elegimos el camino, particularmente defino el libre albedrío como la facultad que se nos da para considerar las opciones que ofrece el entorno en virtud de nuestra conveniencia, así que es por esto mismo, que prefiero pensar que somos libres de elegir la ramificación que más le parezca a nuestro arbitrio, que pensar que nuestro camino es único.
    Como siempre, gran post Ayreo, a tu esponja le debo presentar el pato que tengo en mi baño, para que se cuenten historias "indecibles". XD

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  2. Gracias por tu comentario. Sólo por sumar un contrapunto a la idea de que "somos libres de elegir la ramificación que más le parezca a nuestro arbitrio", creo que hay que tener en cuenta que en principio ya estamos limitados por esos caminos preexistentes (¿cuánto cambia la libertad si puedo elegir entre uno o cien de entre infinitos posibles caminos que me son negados?), y, además, que quizá muchas veces no haya disponible más de uno, que después de todo es lo que sucede cada vez que se usa la libertad de elección (o libre albedrío): nos quedamos con un sólo camino, que por si fuera poco nos predestina en mayor o menor medida de ese momento en adelante (porque al ambiente también lo construimos nosotros).

    Por otra parte: no creo que tu pato esté predestinado a conocer a mi esponja.

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  3. Hoy le explique a mi vieja el "Pienso, luego existo". Si le muestro esto se muere.

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  4. Gran reflexión!!!

    Pero eso de que el presente es la percepción, y el pasado y futuro es algo sobre lo que sólo podemos imaginar,

    me deja una cuestión para comerse el coco algo más,

    ¿Qué es el tiempo presente?

    ¿la infinitésima parte que el universo pasa de un estado a otro?

    ¿y cuánto dura esa infinetésima parte?

    ¿lo que tardamos en darnos cuenta de qué estamos percibiendo?

    ¿me lleva el libre albedrío a comerme el coco cómo me lo como?

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  5. Yo creo que somo un producto de nuestras experiencias.
    El libre albedrío es simplemente el poder elegir entre las opciones que nos son dadas (las cuales creamos a través de nuestras experiencias), y no las opciones que existen (son infinitas y dependen del individuo que las realice), esto me lleva pensar que no es elegir entre lo que mas nos favorezca, (p q puede hacer algo mejor en lo que no pensamos pero existe), es elegir en lo que pensamos que es lo que mas nos favorece.
    Lo que quiero expresar es que el libre albedrío esta limitado por el individuo que goza del mismo, por lo tanto, si esta limitado, no es libre, aunque al mismo tiempo uno es libre de hacer lo que quiera. Tenemos una libertad limitada por nosotros mismos, que si bien no es 100% predecible, lo es en parte.

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  6. Muy interesante, desgraciadamente el ver buenos argumentos hace me vaya un poco por esas teorias en vez de emitir propias... :(

    Pero alcance a darme cuenta de que si tengo un pensamiento "propio" que no se si es propio y ese es el punto de mi punto...

    Puede que estemos predeterminados a lo que sea que nuestro destino este totalemnte escrito por unas leyes fisicas totalmente inmutables pero, al yo no entender eso, al no tener la suficiente abiliad de percepción para darme cuenta de eso, soy libre almenos en mi cerebro... y si alguien me dice lo contrario no le voy a "creer" (asi como cuando un loquito con un casco de aluminio nos dice que los aliens nos controlan), el caso me estoy perdiendo el punto es que asi nosotros seamos unos titeres con los que juegan monstruos en una dimension superior e inperceptible (para Mi) y de esta forma no tenga ningun tipo de libertad o de libre albedrio y sea solo un Sim :P yo soy libre por que no lo entiendo... ese es mi punto asi como el idiota feliz... que es feliz porque no sabe o no le importan las cosas que ponen triste a la gente algo asi... que pena por el desorden de ideas pero bueno esto se trata de aportar con alguito... :)
    el caso un saludo y felicitaciones por otro excelente post

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  7. @conanché, lo que digo es que pasado, presente y futuro, desde una visión filosófica, son estados mentales, no cosas o procesos externos. Hablando muy levemente: en todo caso, el presente podría ser la infinitésima parte de la memoria, de las neuronas o de qué sé yo (probablemente algo mucho más complejo, mezcla de historia personal, memoria de corto plazo, expectativas y mujeres desnudas). Lo importante es que el presente no sería externo y su "duración" dependería mayormente del individuo (¿qué es y cuánto dura el presente para una mosca?).

    @Doc, comparto la idea hasta cierto punto, añadiéndole la interacción con la libertad del resto o el resto de la libertad (de humanos, objetos, fuerzas). Si bien tenemos cierto grado de control de nuestras vidas (aún en el caso de ser automáticos), creo que las máximas sartrianas se aplican muy bien: por un lado, somos la suma de nuestras elecciones previas (que es básicamente lo que quise decirle a Oso); por otro lado, somos lo que hacemos con lo que los demás hacen de nosotros. El problema es que ignoro cuántos lados más puede haber :)

    @Monroy, yo basé este texto en el título de un larguísimo artículo que aún no leí por razones similares: quería pensarlo yo mismo antes de "enterarme" de que soy un cerebro flotando en gelatina o algo así.

    "El hombre está condenado a ser libre." -Jean-Paul Sartre

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  8. Entiendo (aun confusamente) que somos como ratones en un laberinto universal, donde existen infinidad de caminos a tomar, pero estamos condicionados a elegir alguno (o no hacerlo). Es decir ¿Tenemos por genética y naturaleza la capacidad de elegir, pero no la de crear opciones a elegir, las cuales son dadas por nuestro ambiente?

    ¿Será entonces que el arte o la imaginación podrían predecirse en algún momento basado en la visión científica del albedrío? Porque si es así, usaría el mismo para elegir la visión filosófica de elegir. Que contradicción

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  9. Justo de eso hablaba con un amigo, empezamos a hablar del destino y terminamos hablando de libre albedrío como siempre...

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  10. En matemática, cuando el límite de una función tiende a infinito, sabemos que por más que nos acerquemos más y más a la tendencia, nunca nos chocaremos con un ocho invertido.
    El libre albedrío, en mi opinión, son un montón de posibilidades que tienden a infinito. Aún cuando están condicionadas, siguen siendo infinitas (convengamos que hay infinitos más infinitos que otros).

    Por ello, el hecho de estar condicionados (por el entorno y la genética) no quiere decir que no tenemos libre albedrío.
    Es como decir, que si partimos un pedazo de materia a la mitad y a su vez en otros más pequeños, en algún momento tiene que desaparecer. Desaparecer sería la tendencia pero, siguiendo la analogía del límite, nunca chocaríamos con la nada misma (además de que suena ridículo).

    De todas formas, concuerdo con la teoría científica de que somos predecibles. Esto, siempre y cuando pudiéramos tomar en cuenta las infinitos variables que existen al tomar una decisión y esto incluye desde lo que comimos ayer hasta si un pájaro canto muy temprano en nuestra ventana la mañana de un domingo.

    En definitiva, hay argumentos válidos para asegurar que existe el libre albedrío y también para ponerlo en duda, lo cuál no modifica el hecho de que todo seguirá igual.

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  11. Un momento! y donde queda la teoria cuantica?
    Nuestras neuronas, tengo entendido, actuan mediante particulas cuanticas, y como se sabe hasta la fecha, no se puede predecir como va a actuar la particula.
    Y en mi opinion, por estas cosas, existe el libre albedrio.

    Tal vez no tenga muchos conocimientos sobre el tema, pero es lo que entiendo de este.

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  12. Obtener el libre albedrío es muy difícil (o no existe, o hay que tener la voluntad y seguir un proceso) porque va en contra de lo convencional, de lo racional. Entonces me surgen las preguntas ¿Vale la pena tenerlo?, ¿Sirve de algo?, ¿Si una persona lo tiene,se beneficiará lo que lo rodea?. Y me recuerda lo que algunos religiosos proclaman sobre Dios: él te otorga el libre albedrío, sin embargo te pone "pruebas" para que te vayas al camino del "bien".
    Creo que sí existe, es parte de nuestra naturaleza, pero todo lo que nos rodea (incluyéndonos), nos lleva a no tenerlo y a evitarlo.
    Ayreonauta ¿y si la esponja decidió por voluntad convertirse en tu entrañable compañía y dejarse manipular? o si ¿con sus poderosas técnicas milenarias "arrastra" tu mano y te hace creer que tu la controlas cuando realmente es al revés?

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  13. Interesantes puntos de vista. Personalmente, no estoy convencido de nada, pero me gustan las ideas de Sartre, a quien cité más arriba. Según él, todo acto humano es una decisión libre. El ejemplo más extremo que da es el de alguien que está siendo torturado: no puede hacer nada parta evitarlo, pero siempre puede elegir para sus adentros hasta cuándo va a soportarlo. Llega un momento en que dice "no doy más" (y se quiebra, confiesa, se desmaya o lo que sea); él elige ese momento clave.

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  14. PD: Mi otro costado es el que subtituló a este blog como "lo que no estabas buscando"...

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  15. Vaya pasada de post! Me encanta leer todas éstas "expresiones de libertad" pq siento que realmente me activan partes del cerebro q normalmente no funcionan, que tambié se podría traducir a dolor de cabeza. Pero, entrando en el tema, me gustaria comentar una frase en el primer post que me ha hecho pensar que ni filosóficamente somos libres: "sin embargo la filosofía por otro lado dice que las decisiones no estarían determinadas por leyes físicas, ni por el cómo se rige nuestro cerebro, sino que es la capacidad para elegir entre lo que nos favorezca más según la circunstancia".
    Si, de acuerdo, no está determinado por ninguna ley física, ¿pero si usamos esa capacidad de elegir (lo que mas nos favorezca según la circunstancia) de alguna forma, no estamos determinando o conduciendo nuestro pensamiento hacia "eso" que es lo que mas nos conviene? En tal caso, tu pensamiento esta siendo regido por la necesidad o conveniéncia luego, no es libre.
    Si tuviera que dar mi opinión al respecto, diría que para que realmente se cumpliera el libre albedrío tendríamos que estar todos locos, en el sentido de no usar lógica alguna a la hora de hacer alguna acción, aunque seguramente sería una acción que ha sido impulsada por algun pensamiento infantil o por instincto...mierda...estoy dando vueltas...definitivamente creo que para que existiera el libre albedrío no debería existir nada para que aquello primero que fuera a surgir sea producto de la libertad.

    PD: no se si se me ha entendido o siquiera si habeis leído algo xD pero os tengo que pedir disculpas -a los que hayais leído mi coment y a los otros por no haberlo hecho mas esclarecedor- por no tener el conocimiento suficiente como para explicar todo lo que me pasa por la cabeza de una forma entendible.

    Me gustaria además, que me aconsejaran algun escritor que escriba como escribe éste hombre, porque de verdad que no me canso de leer!!! xDD

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  16. Se entiende perfectamente. Estoy de acuerdo con tus objeciones, pero como la filosofía es como la ciencia (un incesante no tanto responder preguntas como formularlas -y creo que por ahí está la clave del libre albedrío: decidir es marcar un rumbo, en este caso, del conocimiento-), paradójicamente, al responder una pregunta estamos tomando una decisión, eligiendo una respuesta, de modo que el mismo método con el que intentamos responder está impregnado de la pregunta, y no sé si es posible librarse de ella.

    Por eso se me ocurrió la idea de que "se es libre hasta que se decide", como si la libertad fuera una moneda que gira en el aire: un estado de incertidumbre o de potencial, una pregunta aún no respondida. En esta idea, pregunta y respuesta conviven al igual que libertad y determinismo, pero se manifiestan alternadamente (más tarde puede volver a lanzarse la moneda hasta obtener el resultado que uno desea).

    Hablo claramente de la libertad de elección, ya que la de movimiento está seguramente predeterminada por la física como mínimo desde el momento de lanzar la moneda... y quizá la elección también tenga sólo una respuesta, pero infinitas posibilidades, y es en esas posibilidades -en el momento en que sólo se manifiestan las preguntas- que existe la libertad: la moneda es "sí y no" hasta que cae.

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  17. Claro, bien dices que los filósofos pueden atreverse a pensar más allá de lo que otros de su misma especie pensaron. El problema es que sea real, por un lado, o que sea útil, que es siempre mi problema.

    Si bien el libre albedrío no existe, precisamente estar consciente de ello es lo que en verdad podría definirnos. Por ejemplo, sabemos que nuestra aversión a los extranjeros es un atributo natural de especies que viven en grupos. Conscientes de ello, podemos elegir ir en contra de ellos, o al menos tomar en cuenta que funciona como un sesgo.
    De cierto modo, sin albedrío podríamos ser hasta un poco más libres

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  18. Si ya es raro hablar de "un punto de vista científico" me parece doblemente raro hablar de "un punto de vista filosófico", como si la filosofía fuese una sola linea de pensamiento.

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  19. Si te gusta más y tu diccionario interior se queda más tranquilo, podemos decir "el punto de vista materialista o empírico" y "el punto de vista no-materialista o especulativo". Da igual.

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  20. Lo poco que entendi creo que las leyes siempre haran que nuestras decisiones sean relativamente parecidas o predictibles, pero hay demasiadas posibilidades encerradas dentro de un mundo de leyes, que podriamos decir es infinito

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  21. Como en la física cuántinca, si en una caja (nuestro cerebro) se encierra una onda-partícula (opción1-opción2) esta no es definida ni como onda ni como partícula hasta que abres la caja y la observas. Coincido Ayreonauta, la libertad termina en el momento en que uno decide.

    es.wikipedia.org/wiki/Gato_de_Schrödinger

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  22. Yo pienso que si hiciramos todo lo contrario de lo que pensabamos hacer podriamos tener libre albedrìo ,suena estupido pero creo que asi seriamos mas libres digo yo, aunque tambièn es cierto que nos sentiriamos mas confundidos ,sobre todo si hacemos cosas que van contra lo que consideramos correcto , pero muchas veces hariamos cosas buenas enfrentandonos a nuestros miedos ,y superando barreras.

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  23. ¡Qué buena idea! Empiezo yo: ¿Quiero vivir? Sí.

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  24. La libertad es una barrera, que puede saltarse pero que luego encontraremos otra, que puede saltarse tambien para mas adelante encontrar otras, no seremos jamás 100 % libres, o mejor dicho no nos sentiremos del todo libres, somos capaces de elegir que comer, pero estamos obligados a alimentarnos o moririamos, y dentro de la libertad de elegir nuestros alimentos estamos presos por nuestro subconciente, que debido a causas externas nos hace elegir lo que creemos que queremos...

    Nuestros grilletes mentales tienen cerraduras que solo la conciencia puede abrir y dejarnos libres, pero luego de quitarnos los grilletos tendremos una reja, mas alla de la reja, un muro, luego una compleja prisión y la gravedad que nos atrae a la tierra, el libre albeldrio es solo un nombre para un fenómeno particular, donde un espiritud rebelde tiene la capacidad de elegir que acción tomar pero siempre dentro de un rango limitado...

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  25. El libre albedrio no existe, y quien diga lo contrario solo esta engañando a su pensamiento (su capacidad de percepcion, su yo, o como querais que lo llame ).

    Durante toda nuestra vida estamos condicionados por lo que habia antes de nosotros.

    Podria poner multitud de ejemplos, pero es obvio, (el mismo cosmos, o karma, o destino, o el flujo del tiempo no tiene porque estar predestinado), nacemos condicionados atrapados en un punto temporal para empezar, eso ya elimina la libertad.

    Otra opcion es la libertad individual, lo que tu quieres pensar, pero ni en nuestra faceta interna tenemos libertad, venimos programados por lo que nuestros padres nos han enseñado, por las ideas que la sociedad nos ha transmitido desde que tenemos uso de razon.

    Yo pienso que con lo que ha evolucionado la especia humana en los ultimos años deberiamos de tener mas en cuenta la educacion que inculcamos a los niños desde pequeños, porque hay es cuando empiezan a ser condicionados

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