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El futuro, hace 100 años [parte 2]

Las extrañas profecías de John Elfreth (segunda parte).
Continuemos con las extrañas profecías de John Elfreth, que -según sus palabras- provienen de las mentes más cultas y conservadoras de América... Hasta ahora vimos que no le fue difícil imaginar las cosas que serían posibles en el futuro, pero no tuvo tanta suerte prediciendo cómo serían posibles esas cosas. Las tecnologías emergentes parecen ser siempre imprevisibles, y estos son otros ejemplos de ello...

Inglaterra a dos días de viaje (desde USA)



Buques eléctricos atravesando las olas a casi 100 kilómetros por hora llegarían de Nueva York a Liverpool (5.300km) en dos días. Los cascos de estos barcos estarían elevados sobre el mar mediante flotadores con forma de trineo y potentes chorros de aire que redujeran la fricción contra el agua. La propulsión sería mediante hélices ubicadas tanto bajo la superficie del agua como sobre ella. Durante las tormentas, el buque completo se refugiaría bajo el océano para proteger a los pasajeros hasta que volviera el buen clima. Nada mal para estar pensado desde 1900; esa es más o menos la velocidad de los cruceros más modernos, aunque, en caso de tormenta, sólo pueden sumergirse una vez, como lo probó eficientemente el Titanic.


Aero-naves



Como buen futurista, no pudo evitar imaginar "buques voladores" para transporte de mercancías y pasajeros. Sin embargo, estaba seguro de que los aviones no podrían competir con el resto de los vehículos, ya fueran terrestres o marítimos. Dijo que las aeronaves quedarían reservadas en todos los países como vehículos de guerra, o como instrumentos científicos para estudiar la Tierra desde gran altura (ni se atrevió a pensar en el espacio). Muy probablemente su pesimismo estuviera influenciado por el vuelo récord de la época, que era de apenas 300 metros y con los huevos en la garganta. La aeronáutica evolucionaría muy rápidamente luego de su predicción, que fue especialmente acertada en cuanto a su uso bélico...


Bombarderos y tanques de guerra



Así los conocemos hoy, pero Elfreth Watkins Jr. se refirió a ellos como "naves de guerra aéreas y fortalezas sobre ruedas", a las cuales soñó junto con armas gigantes con un alcance de 40km y con un radio de destrucción del tamaño de ciudades enteras, guiadas por "brújulas" y "telescopios". Los soldados tendrían rifles con balas silenciosas y podrían atrincherarse y camuflarse en segundos gracias máquinas destinadas a tal fin. El resto de la predicción es cada vez más apocalíptico, pero, aún así, no llega a la altura de la realidad que vivimos (o que ignoramos). Tampoco pudo imaginar que su país gastaría 3 billones de dólares en una guerra contra Irak, a razón de US$ 5.000 por segundo (cuando su programa anti-indigencia sólo recibe 500 mil al año). La moraleja: cuando la predicción sea sobre algo malo, esperemos lo peor...


Sin animales salvajes



En su futuro, no habría animales salvajes, excepto aquellos que permanecieran en cautiverio por la necesidad de estudiarlos o de extraer sus recursos. Comenzando por ratas y ratones, la mayoría de los animales habrían sido extinguidos a propósito por el Hombre, incluyendo al fiel caballo. Evidentemente, su fuerte no era la ecología (a propósito o no, es cierto que estamos extinguiendo a los animales salvajes), pero estuvo más cerca en otras cuestiones: predijo que las vacas y las cabras perderían sus cuernos y que no podrían correr más rápido que un cerdo. Esto tiene sentido si pensamos que, tan sólo 100 años antes de su predicción, los cerdos realmente podían ganarle una carrera a un caballo... pero luego los redujimos a simples bolsas de carne.


Tele-visión



En sus ensueños, vio cámaras conectadas a distantes pantallas eléctricas que reproducirían la acción de cualquier lugar del mundo en cualquier otro lugar. Vio multitudes reunidas en teatros observando en una pantalla gigante los grandes hitos de la Historia del futuro. Vio, luego, estos aparatos instalados en cada hogar, conectados todos a un "teléfono gigante" que transmitía imágenes y sonidos en completa sincronía. Pero no vio que miles de millones de personas cambiarían sus propias vidas por el sólo privilegio de observar las vidas ficticias de las marionetas de una comedia omnipresente basada en la publicidad y el consumo automático. Internet está para cambiar eso, esa pasividad digna de una gallina ponedora; sólo hay que saber aprovecharla.


Teléfonos por todos lados



Todo el planeta estaría interconectado por medio de teléfonos y telégrafos inalámbricos; dio el ejemplo de un marido en medio del Atlántico capaz de conversar con su esposa sentada en su tocador de Chicago, e imaginó todo esto sin operadoras de por medio. La buena noticia para él es que hoy las microondas de la telefonía celular permiten a las esposas controlar saludar a sus maridos aunque sean astronautas en órbita. La mala noticia es que, si bien ya no hay operadoras humanas, hay que escuchar grabaciones a las que se debe responder presionando teclas y luego esperar 30 minutos escuchando una música horrible sólo para poder decir otra vez que "no me van a cobrar lo que se les canta el culo".


Ópera telefónica



La ópera será telefoneada a los hogares, y sonará tan armoniosa como si se disfrutara desde el palco de un teatro. Imginar esto fue una hazaña, teniendo en cuenta que estaba mucho más cerca del fonógrafo de Edison que del home theater. Su visión se parece a lo que conocemos por "radio"; sin embargo, John fue más allá, imaginando: instrumentos automáticos reproduciendo las melodías originales con exactitud y transmitiéndolas a distancia. Finalmente, agrega que muchos nuevos dispositivos potenciarán el efecto emocional de la música... ¿Habrá imaginado RjDj? Seguro que no, ni creo que le haya alcanzado la imaginación para visualizar la revolución de la guitarra eléctrica y la maldición de los ringtones polifónicos.


Educación



Parte de la utopía de este hombre del pasado estaba sustentada sobre la idea de universidades gratuitas para todo el mundo y financiadas por el gobierno para las personas de bajos recursos, con lo que se eliminaría la pobreza. Habría en todas las escuelas médicos para asegurar la buena salud de cada estudiante. Incluso los niños pobres serían llevados de viaje a otras partes del mundo durante las vacaciones, como parte de su formación... Aún no es tarde para todo esto, pero me pregunto por qué toda esta gente, capaz de imaginar futuros tan perfectos, nunca hizo nada para crearlos. Y sé la respuesta: parte del sistema en que estamos obligados a funcionar es la creencia de que el propio sistema debe arreglar nuestros problemas mientras nosotros demandamos esto y aquello. Pero eso nunca funcionó.


Compras a través de tubos



Se ve que en el 1900 los tubos estaban de moda. A John le hubiesen encantado los Teletubbies... En fin, supuso que habría kilométricas tuberías neumáticas para transportar todo tipo de mercaderías desde las fábricas hasta las casas. Esto es interesante porque eliminaría la necesidad de comercios intermediarios y reduciría significativamente el tráfico y el impacto ambiental de éste. También cabría la posibilidad de estudiar el beneficio económico de este sistema. Siguiendo con la predicción, John se figuró que estos tubos también transportarían el correo. Lo que nunca imaginó es que los tubos serían digitales y que debería reenviar el correo a diez amigos para que no le caiga el pene, o cosas por el estilo (por increíble que parezca -se lo cuento a los lectores más jóvenes-, las cadenas de este tipo ya existían antes que Internet).


Vegetales eléctricos



Reflexionó que, con ayuda de la luz eléctrica, los agricultores convertirían el invierno en verano y la noche en día (y eso que no conocía el efecto invernadero) dentro de jardines de vidrio y bajo una iluminación artificial de "rayos de colores" (quizá se refería a la luz ultravioleta, que hoy se usa para potenciar la producción de THC en la marihuana). Pero, además, creyó que habría corrientes eléctricas subterráneas para acelerar las cosechas y matar a las malas hierbas, y que las semillas serían germinadas por medio de estímulos eléctricos. Lamentablemente, no fue la electricidad si no la química la que ocupó estos puestos, inundándonos de antioxidante, emulsionante y emulsificador, estabilizadores, espesante, colorante, saborizante, conservante y, especialmente, el cancerígeno Glutamato monosódico.


Medicina



Estimó que pocas drogas serían ingeridas por vía oral, a menos que fuesen para tratar problemas puntuales del sistema digestivo. Las pastillas serían reemplazadas por vacunas eléctricas que se aplicarían directamente donde fueran necesarias a través de la piel. Esta otra parte es digna de Nostradamus: Los cuerpos vivos serán transparentes para los médicos. No sólo será posible para un médico ver el interior de un corazón vivo, si no que será capaz de ampliar y fotografiar cualquier parte de él. Este trabajo se realiza con rayos de luz invisible. Ya en su época se conocían los rayos X -descubiertos por nuestro amigo William Crookes e investigados por el genial Nikola Tesla-, pero su idea se parece mucho más a la resonancia magnética y otras tecnologías actualmente disponibles.

¿Qué pasará en los próximos 100 años?

11 comentarios

  1. BUENISIMA LA SEGUNDA PARTE :D
    jajaj, compras a tarvez de tubos xD

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  2. Muy bueno!!! Ya comentaré en detalle.

    Saludos.

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  3. Muy buenos los articulos che! Una especia de ray kurzweil del siglo pasasdo resutlo ser

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  4. Wuau increible el mundo utopico que John Elfreht jejeje

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  5. jajaja
    "Aunque, en caso de tormenta, sólo pueden sumergirse una vez, como lo probó eficientemente el Titanic."
    Lo de la guerra.. me sono muy a las leyes de murphy..
    "Si algo tiene posibilidades de salir mal.. saldra peor"

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  6. "pero me pregunto por qué toda esta gente, capaz de imaginar futuros tan perfectos, nunca hizo nada para crearlos"

    No estoy de acuerdo, el Che, Lenin, Trotsky, y muchos otros lo intentaron, lo que pasa es que es mas fácil que otros dañen el avance de unos, como Stalin o Fidel...

    Mucha suerte hombre, hasta luego.

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  7. insorpresa15/8/09 23:40

    Excelente artículo. Me llama la atención este conjunto de "prediccionistas laicos". Suele ser gente muy compentrada con los procesos tecnológicos...A ver si averiguo de un extranjero, inmigrante, que había predicho sobre Buenos Aires no recuerdo de cuándo, pero, como en este caso, tuvo asombrosos aciertos.

    Lo más común es que se digan disparates surreales. Recuerdo una Mecánica Popular" de los 40 (?), que hablaba de cómo sería el mundo en los 2000. Ya estamos en el 2009 y no hay autos voladores que se usan masivamente, ni las ciudades están encerradas en frascos dados vuelta y ese tipo de deseo-pretendida predicción-guitarreo-verdulereo-etcetereleos...

    Me gustaría saber qué dice ese tipo de gente ahora..., que cómo será el 2100...¿Alguien que lo imagine?

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  8. Pero, ¿te imaginas cuántos disparates se dicen hoy acerca del futuro? Ya es bastante difícil imaginar el 2019... creo que 2100 está muchísimo más allá de nuestra capacidad predictiva. Pensando en que todo lo que predijo este ingeniero fue elaborado en base a las tecnologías existentes en su momento, y en que la evolución tecnológica es exponencial y vamos acelerando hacia una supuesta singularidad (no sólo tecnológica, si no evolutiva), creo que las predicciones requieren de mentes cada vez más excepcionales. Por ejemplo, cualquiera puede imaginar un mundo donde abunden los robots inteligentes, pero, ¿quién es capaz de imaginar lo que saldrá de la mente de un ser artificial? Esto en cuanto a la robótica, y lo mismo puede aplicarse a cualquier ciencia. En la astronomía, por ejemplo, todos imaginamos la posibilidad de descubrir, contactar y hasta convivir con seres extraterrestres, pero, si eso sucede, ¿quién puede predecir lo que millones de años de evolución crearon cultural y tecnológicamente en esos seres? Etc.

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  9. insofrito16/8/09 01:58

    Te doy la razón en todo, excepto "contactar y hasta convivir con seres extraterrestres". Depende, si son de esos cabezones de ojos de huevo frito y de color gris...., mnnnn....no sé, lo veo difícil, pero puede que llegue a acostumbrarme. Debe haber adefesios insoportables, con hedor y que suden más que abundantemente una sustancia morada violácea llena de gusanos repugnantes....ajjjjjjjjj....una especie de eté-enfermo y que cuenta chistes sin tregua, todo el tiempo a una velocidad fenomenal....Socorro, seres del infierno!!

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  10. Ojo con lo que comentas, insofrito, porque, nunca se sabe... esos exóticos seres podrían ser mañana lectores de Cibermitanios y tener el poder de desintegrarte con el pensamiento. Aprovecho la ocasión para reafirmar mi amor incondicional por las secreciones violáceas.

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  11. insocomio16/8/09 23:30

    No te enamores del detergente Ayreonauta que te vas a emburbujar

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